Devoción en forma de pólvora al Cristo de la Expiración a su paso por las calles de Órgiva
El Ayuntamiento ha destacado la buena coordinación de los diferentes medios y efectivos de la localidad para que un año más todo haya salido a la perfección.
Las calles de Órgiva se engalanaron durante la tarde de ayer y gran parte de esta pasada madrugada para recibir, entre el numeroso gentío, al Santísimo Cristo de la Expiración acompañado de la Virgen de los Dolores, contando este año como novedad con la Agrupación de Caballeros Legionarios de Viator (Almería). Como marca la tradición, a las seis en punto de la tarde comenzó el recorrido procesional, un momento donde los orgiveños y devotos expresan todos sus deseos y promesas en forma de pólvora. Más de ocho horas de recorrido que estuvieron cargados de vítores, cantes y más de 400 kilos de pólvora en honor al copatrón. El encierro tuvo lugar poco antes de las tres de la madrugada.
La alcaldesa de la localidad, María Ángeles Blanco, que junto al resto de concejales de la corporación de Órgiva, acompañaron a la comitiva, ha destacado “la buena labor realizada tanto por los efectivos de la Guardia Civil, así como por la Policía Local y Protección Civil con el objetivo de conseguir que un año más todo haya salido a la perfección”.
Un día antes de la salida del Cristo por las calles, el jueves a mediodía, centenares de orgiveños, visitantes y devotos presenciaron también el descendimiento de la imagen desde el Camarín donde se encuentra durante todo el año hasta los pies del Altar Mayor, un momento muy emotivo y emocionante en el que la imagen fue aclamada por los asistentes.
Actos en los que el enorme estruendo de los cohetes forma parte de la tradición y la hace referente en la provincia. Este año se han llegado a explosionar más de 400 kilos de pólvora y de la que aún queda por gastar, ya que el próximo sábado día 12 al mediodía tendrá lugar la subida de la imagen del Cristo de la Expiración desde el Altar Mayor hasta su Camarín.
Actos en los que el enorme estruendo de los cohetes forma parte de la tradición y la hace referente en la provincia. Una tradición por los cohetes que viene desde muy antaño. Y es que el Cristo de la Expiración tiene en Órgiva una tradición morisca, a raíz de la invasión en 1815 en la Alpujarra, las cofradías por entonces estaban extinguidas con el cristianismo, y una forma de atraer a toda esa población morisca y vincularla a la religión, era a través de la pólvora, uno de sus principales gustos y, uniendo la pólvora y el cristianismo, surgió la cofradía del Cristo de la Expiración.
La imagen del Cristo de la Expiración data del año 1599 y la cofradía se fundó en 1820 y desde entonces llevan trabajando en que una vez al año los orgiveños den gracias a su patrón por conceder los deseos. Una de las curiosidades que más llaman la atención es que el Cristo de la Expiración responde también al apodo del “cojonuo”, nominación que se le da por la fuerza que tiene en conceder las promesas, por eso cuando se ven cumplidas se transforman en cohetes. En la capital de la Alpujarra existe gran devoción al Cristo de la Expiración y prueba de ello es que la cofradía la conforman casi 300 personas, gran parte de la población orgiveña.