Alcázar de Venus: "Entre la Nieve y la Mar"
NÍSCALOS CON ALMEJAS*
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Una vez llegan las lluvias, igual que los caracoles, debajo de las pinochas florecen los rebollones a los que llamamos níscalos, o setas, o champiñones, que al producto micológico se le dan más de mil nombres; mas vamos a lo que vamos, dejémonos de sermones, y miren esta receta que el que escribe les propone, pues níscalos con almejas, en sus justas proporciones, hacen un gran maridaje, el mejor de los mejores.
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Ingredientes:
Medio kilo de níscalos, sal, pimienta, medio vasito de vino, un cuarto de kilo de buenas almejas*, un diente de ajo, el cuarto de una cebolla y un manojito de perejil picado.
Elaboración:
Se limpian bien los níscalos y se cortan en trozos más o menos pequeños, según gusto, a mí me gustan en tiras. Lavamos las almejas y las dejamos en agua sal hasta el momento de tener que utilizarlas.
En una sartén ponemos dos o tres cucharadas de aceite de oliva y pochamos la porción de cebolla junto con el diente de ajo laminado. Antes de que empiece el ajo a dorarse le añadimos los níscalos, salpimentamos a gusto, los salteamos, le añadimos el vino y los dejamos hervir a fuego medio. Cuando el jugo esté próximo a consumirse, volvemos a enjuagar las almejas y las añadimos a los níscalos. Salteamos todo un poco, subimos el fuego y con una tapadera tapamos la sartén. Estaremos atentos al momento en el que las almejas comiencen a abrirse, entonces bajamos el fuego y cuando estén todas abiertas las servimos en una fuente, o plato, espolvoreándole el perejil por encima.
*(Si en vez de almejas usamos carne de cerdo, jamón, o nada, los níscalos seguirán estando riquísimos.)